Un gran número de padres y madres permiten que el enojo controle las emociones de sus hijos. Al tratar de describir el porque sus hijos sienten tanto enojo, muchos padres tienden a pensar que “así es su carácter”. Pero lo que muchos no saben es que los mismos padres, sin saberlo, pueden estar causando ira en sus hijos. El poder entender las causas de la ira en los niños puede ayudar a los padres a saber como controlar el enojo de los hijos.
Frustración
Efesios 6:4 nos advierte a los padres de no “exasperar” o “provocar” ira a los hijos. Muchas veces estas provocaciones son causadas por:
Efesios 6:4 nos advierte a los padres de no “exasperar” o “provocar” ira a los hijos. Muchas veces estas provocaciones son causadas por:
* La impaciencia: El ser impaciente con sus hijos puede ser una causa de frustración para los niños. El niño puede sentirse inútil y pensar que jamás podrá cumplir las expectativas de los padres.
* Inconsistencia. A menudo los padres son inconsistentes en la manera de criar a sus hijos. Los niños se pueden frustrar cuando los elogios, reglas y disciplina en el hogar constantemente están cambiando.
Temor
En muchas ocasiones la ira es una señal que el niño siente temor. Aunque los temores de los niños puedan ser ilógicos para los adultos, para el niño el temor puede ser algo real.
En muchas ocasiones la ira es una señal que el niño siente temor. Aunque los temores de los niños puedan ser ilógicos para los adultos, para el niño el temor puede ser algo real.
Unos de los temores más grandes del niño es el temor de ser rechazo o abandonando a causa de un divorcio o por una muerte.
Los niños necesitan amor incondicional. Si el niño siente que los padres lo aman sólo cuando cumple ciertas expectativas entonces pueda que sienta ansiedad y enojo porque constantemente debe ganarse el amor de los padres. Algunos pequeños pueden presionarse a ellos mismo para sobresalir en la escuela o en los deportes porque tienen el temor de no cumplir las expectativas de sus padres. Este temor al fracaso, varias veces se manifiesta en los niños como enojo.
Los niños necesitan amor incondicional. Si el niño siente que los padres lo aman sólo cuando cumple ciertas expectativas entonces pueda que sienta ansiedad y enojo porque constantemente debe ganarse el amor de los padres. Algunos pequeños pueden presionarse a ellos mismo para sobresalir en la escuela o en los deportes porque tienen el temor de no cumplir las expectativas de sus padres. Este temor al fracaso, varias veces se manifiesta en los niños como enojo.
Ejemplo
Aunque ningún padre o madre quiera admitirlo pero la ira de sus hijos muchas veces lo aprenden por lo que ven en casa. Pueda que sea de una manera directa o sutil pero lo niños modelan sus comportamiento de acuerdo al ejemplo que dan los padres. Los niños perciben todo y a veces cosas tan pequeñas como los gestos, la manera de caminar y tono de voz pueden enseñarle al niño a hacer enojado.
Aunque ningún padre o madre quiera admitirlo pero la ira de sus hijos muchas veces lo aprenden por lo que ven en casa. Pueda que sea de una manera directa o sutil pero lo niños modelan sus comportamiento de acuerdo al ejemplo que dan los padres. Los niños perciben todo y a veces cosas tan pequeñas como los gestos, la manera de caminar y tono de voz pueden enseñarle al niño a hacer enojado.
Claro hay ejemplos de ira que son más directos como por ejemplo el cerrar las puertas con fuerza, gritar, pegar y tirar objetos. Todos estos son modelos que comunican ira. Así como los niños aprenden a caminar y hablar de los padres, también de ellos aprenden a imitar la ira.
Orden de Nacimiento
Un gran número de niños que son el segundo hijo o hija en el hogar siente enojo por su orden de nacimiento. Normalmente el primer hijo es un perfeccionista que excede las expectativas de todos. Para el segundo niño se le puede ser difícil el poder igualar las hazañas de su hermano o hermana mayor. Cuando el hijo menor siente que es menos inteligente o incapaz a comparación de su hermano o hermana mayor, esto da lugar a que el niño desarrolle sentimientos de ira.
Un gran número de niños que son el segundo hijo o hija en el hogar siente enojo por su orden de nacimiento. Normalmente el primer hijo es un perfeccionista que excede las expectativas de todos. Para el segundo niño se le puede ser difícil el poder igualar las hazañas de su hermano o hermana mayor. Cuando el hijo menor siente que es menos inteligente o incapaz a comparación de su hermano o hermana mayor, esto da lugar a que el niño desarrolle sentimientos de ira.